El rápido deshielo causado por el cambio climático en el Ártico ha generado unos bloques de hielo que fluyen por el océano hacia el sur y que en los últimos años han afectado a la temporada de navegación, el periodo en el que una ruta es navegable para determinados buques.
Un estudio publicado este jueves en la revista ‘Communications Earth & Environment’, ha confirmado que entre 2007 y 2021, el aumento de estos bloques de hielo marino recortó el tráfico marítimo en varios puntos del Paso del Noroeste, la ruta marítima comercial que conecta los océanos Atlántico y Pacífico y atraviesa el Círculo Polar Ártico al norte de Norteamérica.
A la vista de estos datos, los autores del estudio, dirigido por Alison Cook, de la Scottish Association for Marine Science, advierten de que es improbable que el Paso del Noroeste se convierta en una alternativa real a las rutas marítimas tradicionales como se había planteado.
Cartas de hielo marino
Aunque el hielo marino estacional el que se descongela en verano y se forma en invierno se ha ido reduciendo a un ritmo muy rápido debido al cambio climático, esto ha liberado hielo grueso y plurianual de varios siglos de antigüedad de más al norte en los canales de navegación.
Y esos bloques de hielo más grueso son más peligrosos e impredecibles y crean «puntos de estrangulamiento» en las rutas de navegación actuales.
El sector marítimo mueve billones de dólares al año y transporta casi el 90% de todas las mercancías a escala mundial, por lo que determinar con exactitud cuál es el estado de la ruta a través del Paso del Noroeste es de gran interés.
Para hacer el estudio, el equipo utilizó cartas de hielo marino del Servicio Canadiense de Hielo y calculó el número de semanas al año en que los buques podían atravesar con seguridad hielo de hasta 70 cm de espesor entre 2007 y 2021.
Así, descubrieron que la temporada de navegación durante este periodo se había acortado significativamente en tres secciones de la ruta septentrional: el extremo oriental del mar de Beaufort (una disminución de 14 semanas), y el estrecho de M’Clure y el estrecho Viscount Melville (ambas 5 semanas menos).
También constataron que el estrecho de M’Clure (así como los estrechos de Larsen, Peel y Viscount Melville) actuaban como puntos de estrangulamiento en el Paso del Noroeste, ya que experimentaban entre 10 y 25 semanas menos de navegación que otras secciones.
Evitar suposiciones
A la vista de estos datos, los investigadores advierten que la temporada de navegación en todas las rutas del Paso del Noroeste será muy variable, por lo que deben evitarse las suposiciones de que la reducción del hielo marino permitirá un paso seguro por la ruta septentrional.
«Los cruceros, cargueros y petroleros se fijarán en esos canales, sobre todo entre agosto y septiembre, cuando hay menos hielo marino, pero es la época en que el hielo multianual podría ser más frecuente», dice Cook.
«Por ejemplo, estudios anteriores habían sugerido que la ruta septentrional a través del Paso del Noroeste podría ser menos arriesgada en el futuro, pero este estudio demuestra que largos tramos de esta ruta sufrieron disminuciones significativas en la duración de la temporada de navegación entre 2007 y 2008».
«Es improbable que el cambio climático provoque un aumento sostenido de la temporada de navegación en la ruta septentrional del Paso del Noroeste debido a la continua presencia de huracanes», concluye la investigadora. /Con información de EFE-