Hugh Jackman, no deja que su edad defina su capacidad física o su carrera. A pesar de haber alcanzado los 55 años, el actor australiano-británico ha demostrado una notable dedicación a la salud y el fitness, luciendo un cuerpo más tonificado que nunca en su regreso a la pantalla grande como Logan en Deadpool & Wolverine.

De acuerdo con un informe de Man of Many, para alcanzar ese nivel de forma física, el intérprete ha seguido una dieta y un plan de ejercicios sumamente rigurosos en la fase de preproducción de la nueva película, que incluyó la ingesta de más de 8,000 calorías diarias, lo que le permitió ganar una cantidad significativa de masa muscular.

Jackman ha dado vida al mutante por más de dos décadas, lo que implica que su rutina de ejercicios ha variado con los años. Sin embargo, siempre ha sido constante en su enfoque de levantamiento de pesas intensivo y consumo de proteínas. A lo largo de su carrera, ha trabajado con diferentes entrenadores personales. Específicamente, David Kingsbury, un experto en fitness, fue clave en su preparación para filmes como Wolverine: inmortal (2013) y Logan (2017).

En una entrevista con Jimmy Fallon en The Tonight Show, Jackman reveló: “Comes mucho, 6,000 kcal al día. No son las calorías que necesariamente quieres. Puedes comer media pizza y tener 6,000 kcal, pero es pollo, [pez] tilapia y frijoles. No sé por qué tilapia. Debe ser un poco de pescado magro y judías verdes, pero vale la pena”.

El ciclo de carbohidratos dentro de su dieta fue otro punto esencial. Kingsbury enfatizó que Jackman consumía carbohidratos antes de las 3 de la tarde únicamente los días de levantamiento de pesas, eliminándolos prácticamente cada dos días. Además, siempre se aseguró de que todas las calorías y macronutrientes fueran cuidadosamente contabilizados. La dieta también incluía alimentos como aguacate, camotes, arroz integral y pollo, y era predominantemente sencilla y austera.

Por ejemplo, en una foto compartida en redes sociales, Jackman reveló que durante su fase de aumento de volumen, uno de los platos que consumía era lubina negra, de la cual ingería unas 2000 calorías. También comía al menos dos hamburguesas de pollo al día, salmón de la Patagonia y dos solomillos alimentados con pasto, sumando más de 8.000 calorías al día.

Para ponerlo en contexto, Jonathan Majors siguió una dieta de 6,000 calorías diarias durante cuatro meses para su papel de culturista en la popular película de Sundance Magazine Dreams. En contraste, Jackman consumió una cantidad aún mayor.

Su plan de ejercicios involucraba tanto entrenamiento de baja intensidad como intervalos de alta intensidad para mantener bajos los niveles de grasa corporal incluso mientras se ganaba masa muscular. El experto también es un defensor de la sobrecarga progresiva, lo cual implica aumentar gradualmente la cantidad de peso levantado durante el entrenamiento.

En conversación con Who’s Talking To Chris Wallace de Max, Jackman compartió que la transformación física no fue instantánea.

“Aprendí que no se puede apresurar. Aprendí que lleva tiempo. Entonces, tuve seis meses desde que termino (su obra teatral The Music Man de Broadway) hasta que comencé a filmar. Y no estuve haciendo ningún otro trabajo. Estuve con mi familia y entrenaba. Esa era mi única labor durante todo ese tiempo”, aseguró.

Además, aseguró que entre las cosas que jamás realizaría para ganar musculatura se encuentra tomar esteroides. “A lo largo de los años la gente se ha preguntado: ¿Tomaba drogas? ¿Tomaba esteroides?”, le consultó Wallace. A lo que respondió: “No, me encanta mi trabajo y me encanta Wolverine”.

“Tengo que tener cuidado con lo que digo aquí, pero me habían contado anecdóticamente cuáles son los efectos secundarios de eso. Y yo pensaba: ‘No me gusta tanto’. Así que no, simplemente lo hice a la antigua usanza. Y te digo que he comido más pollos. Lo siento mucho por todos los veganos y vegetarianos y por los pollos del mundo. Si la deidad tiene algo que ver con los pollos, estoy en problemas”, bromeó. /Con información de Infobae-