La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Honduras – OACNUDH, lamentó la decisión de retornar el control y operaciones del sistema nacional penitenciario a la Policía Militar de Orden Público (PMOP).
E instó a las autoridades a priorizar la reforma integral del sistema penitenciario, bajo una autoridad civil que garantice la seguridad a través de un abordaje especializado al fenómeno de grupos criminales, y que priorice la rehabilitación y reinserción social de las personas privadas de libertad.
Por tanto, OACNUDH condenó el asesinato de al menos 46 mujeres privadas de libertad en la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS) en Támara el pasado martes 20 de junio, y se solidarizó con las familias de las víctimas.
El organismo internacional culpó directamente al Estado, “el Estado es responsable de proteger la vida e integridad de las personas que están bajo su custodia, en particular de las poblaciones que se encuentran en situación de vulnerabilidad como las mujeres. Estos hechos demuestran la imperante necesidad de acelerar una reforma penitenciaria que involucre a los tres poderes del Estado”, acotó Isabel Albaladejo, Representante de OACNUDH en Honduras.
A la luz de lo sucedido y frente al riesgo de repetición de otros hechos violentos, OACNUDH tomó nota de la decisión de la Corte Suprema de Justicia de extender la aplicación del habeas corpus correctivo a todas las prisiones del país.
La Oficina reiteró su entero disposición de brindar su asistencia técnica al Estado de Honduras para implementar estas y otras medidas que garanticen la no repetición de estos hechos.