Greg Murray, un investigador de psicología que se especializa en el estado de ánimo, el sueño y el reloj circadiano, explica que la neurobiología del cuerpo alcanza un punto de inflexión alrededor de las 3:00 o 4:00 de la mañana.
En este momento la temperatura corporal comienza a subir, las ganas de dormir disminuyen después de varias horas de sueño, la secreción de melatonina responsable de la somnolencia y el descanso ha alcanzado su punto máximo y los niveles de cortisol aumentan a medida que el cuerpo se prepara para un nuevo día.
Cuando duermes rápido, no pasa nada, pero es normal despertarse muchas veces y tener un sueño ligero en la segunda mitad de la noche.
Si por cualquier motivo padece estrés, al despertar adquiere un estado de conciencia plena y pensamientos de malestar o preocupación, fenómeno agravado por la pandemia.
El estrés también afecta el sueño durante los momentos de insomnio, en los que las personas se vuelven hipervigilantes acerca de estar despiertas.
En otras palabras, “preocuparse por estar despierto en un momento en el que debería estar dormido puede hacer que se despierte ansioso después de pasar por una fase de sueño ligero”, según Murray. Los problemas del sueño también están estrechamente relacionados con la depresión.
¿Por qué tienes pensamientos catastróficos en medio de la noche?
Pensamientos catastróficos, apocalípticos, negativos y sombríos se ciernen sobre la mente en el ecuador de la mañana.
Según Greg Murray, esto sucede porque es el punto físico y cognitivo más bajo del ciclo del sueño. Es un momento de recuperación física y emocional en el que los recursos internos son “escasos”. La mente no está preparada para la resolución de conflictos.
La oscuridad o la ausencia de compañía también contribuyen a generar malestar. “Sin nuestras habilidades humanas y nuestro capital social, nos quedamos solos en la oscuridad con nuestros pensamientos”, dice Murray.
Por este motivo, a las 3 de la madrugada es normal ahogarse en un charco, tener ideas irracionales o pensar que los problemas no tienen solución.
El psicólogo aconseja practicar técnicas de mindfulness para alejar esas obsesiones e ideas orientadas al futuro o al pasado. Escanear su cuerpo, concentrarse en los sentidos y concentrarse en el ritmo y la profundidad de su respiración lo ayuda a relajarse y conciliar el sueño.
Si tus técnicas de respiración no funcionan y tu malestar es muy fuerte, puedes encender una luz y lee un rato para escapar de la espiral negativa y dejar que los pensamientos catastróficos se desintegran como una aspirina. / Con información de Business Insider-